Además de los toldos y pérgolas, podemos encontrar otros elementos como parasoles, sombrillas o velas que nos permiten disfrutar del buen tiempo de una forma cómoda y bien protegidos.
Instalar elementos de protección solar en los balcones y terrazas de la casa nos permite no sólo disfrutar de los espacios del exterior de la vivienda sino además protegerla del sol y ahorrar energía. Existe una amplia oferta de toldos y pérgolas dependiendo del espacio que dispongamos, el sistema de apertura que elijamos, la calidad de la lona y, por supuesto, del estilo decorativo que se deseemos.
Antes de elegir un elemento que nos proporcione sombra, habitualmente toldos y pérgolas, debemos analizar la zona en la que vamos a instalarla. Es primordial conocer la trayectoria que tiene el sol para estar seguros de que lograremos proteger toda el área deseada cuando más usemos el espacio. Tras esto, debemos calcular la superficie que se desea cubrir. Elegir si es mejor un toldo de lona, la inclinación, si necesita protecciones adicionales o elementos para modificar rápidamente su posición, etc.
TOLDOS Y PÉRGOLAS
Los toldos son una de las opciones más sencillas de colocar y con amplia capacidad de adaptación a todo tipo de lugares. Además, no ocupan mucho espacio en la pared cuando están recogidos y crean sombra en cualquier espacio. Hay desde toldos diseñados para balcones (con brazos abatibles fijados a la barandilla de forma proyectada o vertical) hasta toldos de brazos articulados, de muchos tamaños.
Los toldos con brazos articulados y extensibles son perfectos para espacios abiertos, como terrazas grandes y porches. ¿Por qué? Pueden crear espacios amplios de sombra sin tener que llevar ningún tipo de soporte adicional. Son estables y resistentes y su mecanismo permite que al cerrar el toldo, se vayan plegando los brazos y enrollando la tela, ocupando un lugar reducido en la fachada cuando no se está usando.
TOLDOS COFRE
Por otro lado, hay un elemento que nos asegura una larga vida útil del toldo sea cual sea su mecanismo de apertura. El cofre, un accesorio que protege completamente la tela y la estructura de los fenómenos atmosféricos y de la suciedad cuando está cerrado. Es un elemento discreto, que suele ser del mismo color que el marco del toldo.
TOLDOS CORREDEROS
Ya sea como complemento de estructuras de pérgolas a modo de techos móviles o bien para cubrir terrazas de grandes dimensiones, cada vez son más utilizados los toldos correderos. Están compuestos por tiras de lona que se deslizan por las guías que los sujetan. Este tipo de toldos puede instalarse entre paredes o en una pérgola independiente.
Los toldos deslizantes pueden ser de accionamiento manual, con tiro de cuerda a través de poleas o de un motor eléctrico accionado de forma fija o con mando a distancia. Además, los toldos deslizantes pueden ser completados con cortinas, instalación de mosquiteras o paneles en los laterales. Nos aportarán una mayor protección y pueden abrirse casi por completo cuando no están usándose. Podemos incluso instalar un sensor que cierre el toldo de modo automático en caso de lluvia o viento y así alargar su vida útil, ya que evitaremos el riesgo de que se estropee si se nos olvida recogerlo.
TEJIDO DEL TOLDO
Además de su estructura y su sistema de accionamiento, una de las características claves de cualquier toldo es el tejido en el que se realiza. Una lona para toldo de calidad bloqueará entre el 90 y el 100% de los rayos solares con lo cual, para gozar de una protección máxima, es recomendable elegir una lona acrílica teñida en masa o una de tejido técnico y microperforada. Cuanto más denso sea el tejido mejor bloqueará los rayos del sol, mientras que los acabados en colores oscuros potenciarán aún más este efecto que los claros.
ALTERNATIVAS A TOLDOS Y PÉRGOLAS
VELAS
Cada vez más demandadas como alternativas a los toldos y pérgolas, tanto por razones estéticas como por su versatilidad, son las velas. A medida, ligeras y capaces de adaptarse a cualquier espacio, una de sus principales ventajas es que pueden sujetarse a fachadas, postes u otros elementos donde puedan fijarse los anclajes metálicos que las tensan. Además, al no tratarse de elementos fijos, pueden desmontarse de forma fácil y guardarse en cualquier rincón, lo cual hace que sean adecuadas tanto como para dar sombra permanente en el exterior de una vivienda como para ser montadas puntualmente en fiestas o celebraciones al aire libre.
SOMBRILLAS Y PARASOLES
Concebidos para resistir a la intemperie, otra de las grandes ventajas de las sombrillas y parasoles es la enorme gama de colores y diseños en los que podemos encontrarlos disponibles. Estas son otras de las alternativas a toldos y pérgolas. Su mejor virtud es que se adaptan a cualquier entorno y no suponen una inversión excesivamente importante. Suelen estar realizados con estructuras de madera, aluminio o acero inoxidable y con coberturas tejidos acrílicos, y técnicos, a menudo con tratamientos hidrófugos e impermeables.
Además, la oferta de sistemas de colocación y apertura es muy amplia y abarca modelos para cualquier espacio y situación: con pie central, para colocar sobre base o en una mesa; lateral, para crear zonas de sombra sin obstáculos; orientables, articulados… Igualmente, por lo que se refiere a los tamaños, ahora mismo los modelos de grandes dimensiones y formas geométricas son los más demandados.